Instituto de Artes Pesqueras

Este diseño se desarrolló durante el primer semestre del cuarto año bajo la dirección de los profesores Robin Planas y Rafael Vargas. Tras estudiar el área de intervención en La Puntilla en Cataño, se pudo identificar una serie de desafíos importantes, como los riesgos climáticos, la falta de vegetación, la contaminación, el exceso de áreas construidas, la complejidad histórica, asuntos demográficos y problemas de planificación. Esto generó la necesidad de diseñar un plan maestro a largo plazo para el área, el cual se realizó en grupos. En esta fase tuve el privilegio de colaborar con las compañeras Naiomy Columna, Valeria Babilonia, Jaitly Zavala y Valeria Cruz en este proyecto. El Plan Maestro se estructuró en tres fases, cada una guiada por tres verbos clave: Proteger, Conectar y Prosperar. Durante el proceso de diseño, exploramos diversas estrategias para lograr estos objetivos, resultando en un malecón protector en el área norte, una rambla en la avenida principal que conecta Cataño con el área de intervención, y una serie de paseos al sur sobre un ecosistema de manglares y lagos de retención. El diseño se concebía para que cada proyecto individual en el área de intervención se adaptará al plan maestro.

El proyecto de diseño individual consiste en un Instituto de Artes Pesqueras, con un concepto que busca crear dos volúmenes distintos. El primero, siguiendo el Plan Maestro, crea un espacio central, mientras que el segundo aprovecha las virtudes del área de intervención y sus vistas. El programa del proyecto incluye áreas de lobby, visitantes, administración, cafetería, talleres, salones de clase, laboratorios y auditorio, siendo el primer nivel el más público. El instituto está rodeado por plazas y muelles que reciben los paseos del plan maestro. Al norte, una plaza y un muelle de pesca buscan conectar con el mar. En el centro, una plaza con áreas verdes enmarcadas por la forma del edificio y un área de recreación. Al sur, una conexión directa al paseo del manglar. La clave del proyecto radica en la modulación y regulación de los espacios y la curva, centrándose en satisfacer las necesidades del trópico y aprovechar las tecnologías pasivas en el área, brindando un espacio nuevo para el casco urbano que tanto lo necesita, con una atmósfera de serenidad.